¿Cómo influyen las relaciones sociales en el desarrollo del lenguaje de los niños?

Los niños desarrollan el lenguaje a través de interacciones sociales de calidad. Estos valiosos momentos de aprendizaje del lenguaje pueden surgir de las interacciones ya sea con sus padres o con otras personas que el niño conoce.

El tiempo que los niños pasan con los educadores en la escuela, o jugando con sus hermanos en casa, influye en la cantidad de lenguaje que los niños escuchan o ven. Estas interacciones pueden ocurrir en momentos en los que los padres no tienen tiempo de sentarse a leer un cuento o involucrarse en juegos de fantasía. A primera vista pudiera parecer que otros adultos, y no otros niños como los hermanos, serían la mejor opción para enseñar lenguaje a los niños. Al fin y al cabo, estos otros niños todavía están aprendiendo a hablar. Sin embargo, parece que la aportación lingüística de otros niños sí puede contribuir al desarrollo del lenguaje de un niño pequeño. De hecho, en algunas comunidades, la mayor parte del lenguaje que los niños oyen o ven proviene de otros niños. Aparentemente, tanto los niños que oyen o ven lenguaje de otros niños, como los que lo ven u oyen de adultos, tienen trayectorias de desarrollo del lenguaje similares.

El pasar tiempo con diferentes personas también aumenta la variabilidad del lenguaje que los niños oyen o ven. Cada persona tiene una forma ligeramente diferente de hablar o hacer señas. Puede que utilicen palabras diferentes, que prefieran estructuras gramaticales distintas o que pronuncian los sonidos o produzcan señas de forma ligeramente diferente. Aunque podría parecer que esta variabilidad dificultará el desarrollo del lenguaje, parece ser que tanto los bebés que escuchan el lenguaje de una sola persona, como los que lo escuchan de una variedad de personas,  aprenden los sonidos de su lengua materna a un ritmo similar.

Más allá del rendimiento lingüístico puro, interactuar con muchas personas puede mejorar la comunicación social de los niños. La comunicación social es la que permite, más allá de hablar, comunicarse exitosamente; por ejemplo adaptando el discurso a las reacciones del otro, o tomando turnos para hablar y escuchar.

En conclusión, tanto si los niños crecen escuchando el lenguaje de una sola o de muchas personas, lo más fundamental es la calidad de las interacciones sociales ¡Existen muchas formas de aprender lenguaje y muchas personas de quienes escucharlo!

Las fuentes científicas de nuestro cómic:

Havron, N., Ramus, F., Heude, B., Forhan, A., Cristia, A., Peyre, H., & EDEN Mother-Child Cohort Study Group. (2019). The effect of older siblings on language development as a function of age difference and sex. Psychological Science, 30(9), 1333-1343.

Bergmann, C., & Cristia, A. (2018). Environmental influences on infants’ native vowel discrimination: The case of talker number in daily life. Infancy, 23(4), 484-501.

Demuth, K. (1992). Acquisition of Sesotho. In The cross-linguistic study of language acquisition (pp. 557-638). Lawrence Erlbaum Associates.